La razón por la que los resultados de la práctica no pueden producirse de inmediato es porque el resultado solo surge de la plena conjunción de todas sus causas y condiciones. Simplemente el resultado no puede surgir a menos que todas las causas y condiciones confluyan. Por ejemplo, si plantamos la semilla de una flor y esperamos que aparezca la flor el mismo día o al siguiente nos vamos a sentir decepcionados. Del mismo modo, si estamos enfermos y esperamos recuperarnos inmediatamente por haber realizado un pequeños acto de virtud, esto no va a suceder, porque aún no se han dado todas las causas y condiciones. Es más, si el resultado fuera a producirse en el momento indebido, cuando todas las causas y condiciones no se han dado, esto iría en contra de la ley de causa y efecto, ya que mostraría la posibilidad de que se produzca el resultado antes de que se completen sus causas.
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Khenchen Appey Rinpoche